El vacío
Golpea en mí con fuerza de tornado,
desgarra el corazón, lo hace jirones,
se alimenta de todas las pasiones
y se adueña de todo, despiadado.
Es el abismo interno y obligado
descarnante voraz, sin concesiones,
que me dirige y vence sin fricciones;
yo no logro escaparme de su lado.
Me ahogan en la noche mis entrañas
que cierran mi garganta como arañas;
me impiden respirar el aire puro.
Me esclaviza el vacío que me llena
recubriendo mi piel de color pena;
día a día se vuelve más oscuro.
Elvira Sierra
Octubre 2015